El presidente de Francia, Jacques Chirac, dijo que las autoridades harán todo lo posible para solucionar los problemas en el Sistema de Salud del país, tras la muerte de miles de personas durante la reciente ola de calor que azotó a la nación.
Chirac, que regresó ayer a París después de tres semanas de vacaciones, pronunció un discurso televisado a todo el país al finalizar una reunión de gabinete de gobierno en la que analizó la crisis generada por la ola de calor.
Entre tanto, Hubert Falco, funcionario encargado de supervisar el sistema de asistencia social para personas de la tercera edad, afirmó que el gobierno aceptó una lista de más de 10 mil personas fallecidas, emitida por los directores de empresas funebres.
En Portugal, los medios de prensa informan que más de mil 300 personas murieron a causa del intenso calor.