Las autoridades indias informaron que el estallido de dos bombas estremeció Bombay, la capital financiera del país, y causó la muerte de 46 personas y heridas a más de 100.
Informes indican que las bombas fueron colocadas en taxis en el sur de Bombay.
La primera estalló en el histórico monumento “Puerta a India”, un popular sitio turísitico, y minutos después ocurrió la otra detonación cerca de un concurrido mercado de alajas.
Nadie se ha atribuído la responsabilidad.
En el pasado India ha culpado de tales incidentes a extremistas islámicos respaldados por Pakistán. Islamabad condenó rápidamente las mortales explosiones y las calificó como un acto de terrorismo.