Australia dejó de lado una protesta de Uruguay sobre la captura en alta mar de uno de sus barcos de pesca, al que se acusa de pescar especies autralianas en peligro de extinción.
El canciller uruguayo declaró que la captura, el mes pasado, de la jábega, “Viarsa Uno”, pudo haber violado la ley internacional y exigió que un observador del gobierno de Montevideo que está a bordo de la nave sea liberado inmediatamente.
Sin embargo, el gobierno de Canberra comunicó que nadie será removido del barco hasta que atraque en el puerto australiano de Fremantle, donde se espera su llegada para dentro de aproximadamente cuatro semanas.
Autoridades autralianas persiguieron el bote pesquero por tres semanas y seis mil kilómetros antes de capturarlo.
Australia acusa al barco de pescar 85 toneladas del merluza negra, en la zona de pesca australiana subantártica.