Venezuela, país que congeló su paridad cambiaria el 2002 para frenar la fuga de capitales, planea una devaluación gradual este año, según afirmó ayer un legislador, que negó una "maxi-devaluación".
En un intento por desalentar las especulaciones, Rodrigo Cabezas, presidente de la Comisión de Finanzas de la Asamblea Nacional y cercano aliado del presidente Hugo Chávez, negó que el gobierno tenga planes de aplicar una "maxi-devaluación" de la moneda.
Cabezas aclaró que el gobierno decidió en noviembre ajustar el tipo de cambio gradualmente, lo que representará una depreciación de 20% respecto a la paridad actual en los próximos 12 meses.