Ronald Reagan eligió ser enterrado en una colina en su museo y biblioteca presidencial, en su adoptado estado de California.
El lugar del descanso final para el cuadragésimo presidente de Estados Unidos, está sobre Simi Valley, unos 65 kilómetros al norte de Hollywood donde Reagan trabajó como actor antes de entrar en política, y al sur de la hacienda en la cual a menudo buscó refugio de Washington, cuando era Presidente.
Huéspedes invitados al entierro a la puesta del sol incluyeron amigos de sus días tanto en Hollywood como en Washington.
El centro presidencial de 40 hectáreas en Simi Valley fue financiado por donaciones privadas y se inauguró en 1991.
El mismo contiene recuerdos incluyendo una parte del Muro de Berlín, y una réplica del despacho presidencial de la Casa Blanca.