Un presunto ataque con cohete contra una base militar norteamericana cerca de la norteña ciudad de Mosul causó la muerte de por lo menos 24 personas y lesiones a más de 60.
El brigadier general, Carter Ham, declaró este martes en Mosul que los muertos y heridos incluyen personal militar estadounidense y contratistas extranjeros, así como soldados iraquíes.
Aunque informes recientes dijeron que en el atentado se usaron cohetes y morteros contra el comedor de la base, Ham señaló que la fuente de la explosión continúa bajo investigación.
En Washington, la Casa Blanca condenó el ataque y prometió derrotar a los terroristas en Irak.
El ejército de Ansar al Sunna vinculado con la red terrorista al Qaeda se atribuyó la responsabilidad del ataque en una declaración publicada en una página web islámica.
La autenticidad del reclamo no pudo ser verificada, pero el grupo ha figurado prominentemente en la insurgencia de Irak. Los rebeldes han aumentado sus ataques en Mosul recientemente, después que muchos de ellos tuvieron que salir huyendo de su ex baluarte en Faluya.