Para sorpresa de muchos que lo tenían por un respetado y buen policía en Anchorage, la ciudad más poblada de Alaska, Rafael Espinoza resultó ser otro que no era él.
Esta semana las autoridades descubrieron que el agente en realidad se llamaba Rafael Mora-López, que era de nacionalidad mexicana y que estaba ilegal en el país después de haberle robado la identidad al verdadero Rafael Espinoza, un estadounidense que reside en otro estado.
Al anunciar que el impostor había sido arrestado, el jefe de la policía de Anchorage, Mark Mew, admitió que la reputación del detenido “era la de un agente muy trabajador y muy profesional”.
Poco después del anuncio, Mora-López compareció en corte y se declaró no culpable de la acusación de fraude con un pasaporte, que conlleva una pena máxima de 10 años de cárcel.
Durante la instrucción de cargos, el acusado dijo a un juez federal que su edad real es de 47 años y no 51 como se había dicho oficialmente.
El hombre, que era policía en Anchorage desde 2005, fue descubierto cuando agentes federales procesaron su petición para que se le renovara el pasaporte. Luego hicieron un registro en su domicilio y hallaron documentos que confirmaronn su identidad real.
La fiscal de distrito, Karen Loeffer, dijo que las autoridades no tienen prueba de otra cosa hasta ahora que no sea que el acusado era “un buen agente de policía”.