El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, afirmó, durante su conferencia de prensa matutina del lunes que las tensiones con Estados Unidos por el caso del exministro de Defensa, Salvador Cienfuegos, acusado de vínculos con cárteles, no afectarían la cooperación entre ambos países.
Las palabras del mandatario se dan después de que el Departamento de Justicia de Estados Unidos amenazara el sábado con poner fin a la colaboración policial con México después de que López Obrador acusó a la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA) de fabricar pruebas.
Autoridades estadounidenses apuntaron que la publicación por parte del gobierno mexicano de más de 700 páginas de material de investigación en el caso del general retirado Salvador Cienfuegos viola un acuerdo entre los dos países.
El presidente de México, sin embargo, insistió en que México había "actuado correctamente" y que no se dañarían los lazos entre los vecinos. "Las relaciones con el actual gobierno son buenas (...) y eso continuará con la nueva administración del presidente Biden", auguró López Obrador.
Cienfuegos, figura clave en el gobierno del expresidente Enrique Peña Nieto, fue acusado por Estados Unidos de conspirar para producir y distribuir "miles de kilogramos" de cocaína, heroína, metanfetamina y marihuana.
Su arresto en un aeropuerto de Los Ángeles en octubre de 2020, por cargos que podrían haber resultado en la cadena perpetua, sorprendió al gobierno mexicano, que presionó con éxito para que lo enviaran a casa para enfrentar un posible procesamiento.
El jueves pasado, los fiscales mexicanos exoneraron al hombre de 72 años, rechazando las acusaciones de Washington, acción que causó rechazo en el Departamento de Justicia estadounidense, que ha afirmado que la acción de México fue decepcionante y "cuestiona si Estados Unidos puede continuar compartiendo información para respaldar las propias investigaciones criminales de México".
López Obrador dijo que su gobierno había decidido dar a conocer el voluminoso expediente estadounidense "para que se supiera, sin ocultar nada (...) que los crímenes en realidad fueron fabricados".
Cuando se le preguntó sobre la reacción de Estados Unidos, agregó: "Yo también podría decir lo mismo: "Estamos decepcionados con el trabajo de la DEA".
* Con información de AFP y Reuters.
