El mortal incendio forestal que comenzó el sábado en la región central española de Guadalajara está prácticamente controlado.
Once bomberos perdieron la vida luchando contra las llamas.
Aviones continúan lanzando bombas de agua en los sitios que pudieran incendiarse nuevamente.
Las llamas quemaron miles de hectáreas de bosques y obligaron a cientos de personas a abandonar sus hogares.
Según las autoridades, un grupo de excursionistas confesó haber prendido una hoguera que comenzó el incendio.
Los excursionistas enfrentan cargos criminales. Muchas partes de España están sufriendo la peor sequía del país en 60 años.