Fuerzas israelíes comenzaron a evacuar el último asentamiento judío en la Franja de Gaza después de casi 4 décadas de ocupación en el territorio palestino.
Residentes de Netzarim aceptaron salir pacíficamente luego de orar junto a los soldados enviados para desalojarlos.
Motoniveladoras israelíes comenzaron la demolición de casas en los restantes 20 asentamientos de Gaza.
Entretanto, miles de policías y soldados israelíes tomaron posiciones frente a dos colonias cisjordanas que serán desalojadas mañana.
Comandantes israelíes calculan que unos dos mil ultra nacionalistas se encuentran refugiados en las colonias de Sanur y Homesh, cuyos habitantes las abandonaron previamente.
Las autoridades israelíes dicen que varios de los militantes recién llegados han amenazado con resistencia armada al desalojo.