Unos dos mil manifestantes invadieron una plantación en el sur de Brasil, el miércoles, donde se cosecha una crucial planta usada en la producción de papel.
Los manifestantes, en su mayoría mujeres, dominaron a los guardias de seguridad en la plantación, desarraigaron eucaliptos y destruyeron un laboratorio.
La gigantesca compañía agroindustrial brasileña Aracruz, que es propietaria de la plantación, informó que la incursión ocasionó 400 mil dólares en daños y la pérdida de años de investigación genética de plantas que podría llevar a la merma de millones de dólares.
La incursión fue organizada por el grupo internacional de defensa de los trabajadores agrícolas, Vía Campesina, para coincidir con el Día Internacional de la Mujer.
El grupo dice que la invasión fue realizada para denunciar el masivo cultivo de eucaliptos y otros árboles.
La pulpa de esas plantas produce celulosa, el principal ingrediente en el papel.
Ambientalistas y pequeños granjeros dicen que la pulpa aruina el suelo, seca los ríos y causa contaminación.