Tres terremotos han sacudido el Oeste de Irán, derrumbando casas, destruyendo aldeas y dando muerte a por lo menos 66 personas.
Más de mil personas resultaron lesionadas durante los temblores ocurridos en la madrugada y sus remesones que afectaron las ciudades de Doroud y Boroujerd, y varias aldeas.
La agencia oficial de noticias de Irán, IRNA, informó que el presidente Mahmoud Ahmadinejad emitió instrucciones al ministerio del interior para que movilice todos los recursos disponibles hacia la región afectada.
En Inglaterra, este viernes, la secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice dijo que Estados Unidos está preparado para ofrecer ayuda humanitaria a las víctimas.
El primer terremoto sacudió el área poco después de las 11 de la noche, hora local, el jueves.
El servicio Geológico de Estados Unidos indicó que el más fuerte de los tres sismos, cuya magnitud fue de 5,7 en la escala de Richter, ocurrió apenas antes del amanecer de este viernes.
Los terremotos son un acontecimiento común en Irán, que está ubicada sobre varias importantes líneas de fallas geológicas.
En 2003, un poderoso terremoto destruyó la antigua ciudad de Bam, matando a por lo menos 26 mil personas.