En Francia, funcionarios del gobierno se reúnen, este viernes, con líderes estudiantiles y sindicales para ahondar en las conversaciones sobre la controversial ley de trabajo juvenil que ha provocado semanas de masivas protestas en todo el país.
Las conversaciones están estancadas. Líderes estudiantiles y sindicales exigen que la ley sea anulada y el gobierno insiste en que es necesaria para reducir la alta tasa de desempleo entre la juventud.
El Primer Ministro Dominique de Villepin dijo, el jueves, que está dispuesto a considerar todas las propuestas para poner fin al impasse, pero no dio indicaciones de que la ley vaya a ser anulada.
Dirigentes estudiantiles fijaron el 17 de abril como plazo para que el gobierno anule la ley, la cual facilita que los empleadotes despidan a trabajadores jóvenes en los primeros dos años de empleo.