El ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia rechazó un llamado de Estados Unidos para detener la construcción de una planta nuclear en Irán.
El portavoz de la cancillería rusa, Mikhail Kamynin dijo este jueves que cada país tiene el derecho de decidir por sí mismo cómo y con quién coopera.
Kamynin respondió a un llamado hecho el miércoles por el vice-secretario de Estado Nicholas Burns, de que los países pongan fin a toda cooperación nuclear con Irán.
En Moscú, donde Burns se encuentra para sostener conversaciones sobre Irán, Burns dijo que al gobierno de Teherán se le debería negar tecnología que pueda ayudar a su programa nuclear, incluyendo la planta que Rusia está construyendo cerca de la ciudad iraní de Bushehr.
El director de energía atómica de Rusia, Sergei Kiriyenko, defendió el proyecto de Bushehr, argumentando que el trabajo en la planta de 800 millones de dólares, se realiza en total cumplimiento con el Tratado de No-Proliferación Nuclear.