El secretario general de la ONU, Kofi Ánnan, formuló un llamado, en Consejo de Seguridad, este jueves, a un inmediato cese el fuego entre Israel y la milicia libanesa de Hezbollah, para permitir que la diplomacia encuentre una solución a la crisis.
Ánnan dijo: “He enfatizado reiteradamente que lo que se necesita con más urgencia ahora es un inmediato cese de las hostilidades por tres razones vitales: Primero, para evitar más pérdidas de vidas humanas y para no infligir más sufrimiento. Segundo, para permitir el acceso de ayuda humanitaria a quienes la necesitan. Tercero: para dar a la diplomacia una oportunidad de adoptar un conjunto de acciones prácticas que proveerían una solución duradera a la actual crisis.”
Ánnan reconoció sin embargo, que hay “serios obstáculos” para poner fin rápidamente a la violencia.
Dan Guillerman, embajador de Israel en la ONU, habló luego de la sesión del Consejo de Seguridad, comentando el pedido de cese el fuego de Ánnan.
Guillerman dijo: “Los tres elementos clave en esta crisis: el terrorismo, Irán y Siria no fueron encarados, y quienquiera que pida un cese de hostilidades debe primeramente considerar la causa central y la raíz de por qué comenzaron originalmente las hostilidades.”
Previamente, este jueves, el ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia indicó que la ofensiva de Israel en el Líbano ha ido mucho más allá de una campaña anti-terrorista, y pidió un inmediato cese el fuego.
En el Vaticano, el Papa Benedicto 16 también pidió que se suspendan las hostilidades y fijó el domingo como un día de oraciones por la paz.
La Unión Europea también convocó a un cese el fuego e indicó que donará más de 12 millones de dólares para las víctimas del conflicto.
Egipto, un cercano aliado a Estados Unidos, también pidió un inmediato cese de los combates.
Los pedidos de una tregua están poniendo a muchos países en contra de la posición de Estados Unidos.
La secretaria de Estado, Condoleezza Rice, favorece un cese el fuego cuando las condiciones sean lo que ella llamó “conducentes”. Estados Unidos señaló que no le dirá a Israel lo que tiene que hacer.