En la localidad boliviana de Huanuni, fueron sepultados los mineros bolivianos que fallecieron la semana pasada en un enfrentamiento de grupos que se atacaron mutuamente con dinamita y armas de fuego.
El incidente causó la muerte de 16 personas, mientras otras 61 resultaron heridas. Autoridades señalaron que la violencia se inició cuando cientos de mineros que pertenecían a cooperativas independientes atacaron la gran mina de estaño estatal Huanuni, exigiendo mayor acceso a sus depósitos.
Los mineros independientes habían apoyado al presidente Evo Morales en su campaña electoral.