En Panamá, los votantes aprobaron un plan a siete años, por cinco mil 200 millones de dólares, para expandir el Canal de Panamá.
Cuando ya casi se han computado todos los votos, las autoridades dicen que el plan de modernización recibió casi el 80% de apoyo.
La asistencia a las urnas fue de casi un 40%.
El plan creará una nueva línea de navegación, usando nuevas esclusas y un canal más ancho y profundo, para permitir que las embarcaciones más grandes del mundo usen la vía interoceánica.
Quienes apoyan la expansión dicen que es esencial para que Panamá siga siendo competitivo en el tráfico marítimo global, y que proporcionará miles de empleos e impulsará la economía del país.
Sus oponentes argumentan que beneficiará a los clientes del canal más que a los ciudadanos de Panamá.