Un ataque aéreo de la OTAN, la Organización del Tratado del Atlántico Norte, causó la muerte a tres presuntos insurgentes en el este de Afganistán.
Autoridades militares informaron que basados en información confiable de inteligencia, tropas afganas y de la Alianza Atlántica allanaron una vivienda y se enfrentaron a tiros con los sospechosos en la provincia de Khost.
Posteriormente, se pidió apoyo aéreo, y en el ataque murieron tres insurgentes.
En la sureña provincia de Kandahar un terrorista suicida hizo detonar el vehículo que conducía, al paso de un convoy de la OTAN.
Dos soldados quedaron heridos y un vehículo resultó dañado en el ataque. No se informó la nacionalidad de los efectivos.
Entretanto, el máximo comandante de la OTAN en Afganistán, el general británico David Richards, dijo al Financial Times, que no tiene suficientes tropas para derrotar al Talibán en los próximos seis meses.
Richards agregó sin embargo, que puede hacer lo que calificó de “suficientes mejoras” para mantener la confianza de los afganos en el gobierno y en la comunidad internacional.