El Papa Benedicto dieciséis elogió la mejoría en las economías de Latinoamérica y El Caribe y las señales de que los gobiernos de la región han aumentado su disposición a combatir el tráfico de drogas y la corrupción.
El Pontífice también hizo un llamado a poner fin a los conflictos del continente africano e instó a las naciones desarrolladas a acelerar la cancelación de deudas de los países más pobres.
En su discurso anual a los diplomáticos Benedicto dieciséis dijo que los partidos no deben olvidar “la guerra y las tensiones en África”.
El pontífice se refirió específicamente a los conflictos en Darfur y a los combates en Somalia, Uganda, Costa de Marfil y la región de los Grandes Lagos.
El papa llamó a todas las partes a iniciar negociaciones en Somalia e instó al mundo a rezar por la paz en Uganda.