La reina Isabel de Gran Bretaña finalizó su visita de seis días a Estados Unidos ofreciendo una cena de estado a presidente Bush en la sede de la embajada británica aquí en Washington.
Durante su brindis anoche (martes), la monarca elogió al nuevo gobierno de poder compartido de Irlanda del Norte.
Isabel II agradeció al presidente Bush y a sus predecesores por su ayuda en la búsqueda de paz entre las facciones Católica y Protestante.
La Reina también hizo bromas relacionadas con el error del mandatario norteamericano, quien estuvo a punto de decir que la reina había visitado Estados Unidos en 1776, en lugar de decir 1976.
Por su parte, Bush calificó el logro en Irlanda del Norte como un ejemplo de la forma en que “la democracia y la libertad pueden sanar un mundo con problemas”.