El presidente de Rusia, Vladimir Putin, se encuentra en Luxemburgo, en la última escala de una visita por Europa, destinada a impulsar los vínculos comerciales y energéticos bilaterales.
Funcionarios de Luxemburgo y de la empresa estatal rusa Gazprom, que monopoliza la comercialización de gas, debían firmar un acuerdo para construir una planta de gas natural.
Ambos gobiernos también tienen previsto firmar acuerdos bancarios y acereros.
El miércoles, en Viena, Putin mantuvo conversaciones con funcionarios austríacos, sobre temas que fueron de lo económico a lo cultural, a los planes estadounidenses para instalar un sistema de misiles de defensa, en Europa central.
El presidente ruso nuevamente expresó su vigorosa oposición al plan, diciendo que desestabilizará a la región y provocará una carrera armamentista internacional.
En Washington, el Departamento de Estado nuevamente trató de asegurar a Moscú que el sistema de misiles no es una amenaza para Rusia.