En el norte de España, la policía desactivó un enorme coche-bomba colocado por presuntos separatistas vascos.
Las autoridades españolas informaron, este lunes, que si bien el detonador de la unidad fue activado, no hizo estallar los 80 kilogramos de explosivos que se encontraban en el auto, en la ciudad de Logroño.
Fuentes oficiales informan que un miembro del grupo guerrillero vasco ETA llamó a un diario local, con una advertencia, el domingo de noche, 30 minutos antes de que explotara el detonador.
En un comunicado emitido previamente, el domingo, ETA dijo que planea continuar su campaña violenta, para alcanzar sus objetivos.
En 2006, ETA propuso una tregua al gobierno español, pero las negociaciones fracasaron, en las subsiguientes conversaciones.
El grupo vasco canceló el cese el fuego en junio.
Más de 800 personas han muerto en casi cuatro décadas de campaña de ETA para la creación de un estado vasco independiente, en el norte de España y sudoeste de Francia.