El presidente pakistaní, Pervez Musharraf, inició un periodo de cinco años como presidente civil.
Musharraf asumió el cargo en el palacio presidencial, este jueves, calificando el hecho como un “hito” en la transición de Pakistán a la democracia.
El mandatario juró al cargo un día después de renunciar como jefe de las fuerzas armadas, poniendo fin a su carrera militar de 46 años.
En su discurso inaugural, el líder pakistaní dijo que el regreso del exilio de dos ex primeros ministros, Benazir Bhutto y Nawaz Sharif, fue “bueno”, para la reconciliación política.
Ninguno de los dos estuvo presente durante la ceremonia de asunción al mando, realizada en Islamabad.
Musharraf también reafirmó su promesa de concretar las elecciones parlamentarias, planeadas para el 8 de enero.
Como lo señaló “las elecciones se realizarán en enero, de una u otra forma”.
Sin embargo, no indicó en qué momento levantará el estado de emergencia, impuesto el 3 de noviembre.
Entretanto, en la ciudad de Lahore surgieron enfrentamientos y la policía usó bastones para dispersar a unos 200 abogados, cuando trataban de efectuar una marcha de protesta, contra el régimen de Musharraf.