Grupos internacionales de derechos humanos acusaron al gobierno de Colombia de hacer peligrar la vida de activistas en ese país, y exigieron a su gobierno que haga más para protegerlos.
En una carta hecha pública el miércoles, Amnistía Internacional, Human Rights Watch, y más de una decena de otras organizaciones solicitaron al presidente colombiano, Álvaro Uribe, que tome medidas para detener la violencia contra los defensores de derechos humanos y los sindicalistas.
La misiva se refirió a amenazas, ataques y muerte de activistas que se han producido luego de la protesta, el 6 de marzo, contra violaciones a los derechos humanos por parte del estado y los paramilitares.
En la carta también se acusa a un asesor de Uribe, José Obdulio Gaviria, de hacer peligrar las vidas de quienes participaron en la manifestación al sugerir que sus organizadores estaban afiliados con rebeldes de las FARC.
No hubo respuesta inmediata del gobierno de Uribe.