La organización de derechos Human Rights Watch afirma que por lo menos 14 presuntos terroristas fueron transferidos a Jordania por la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos, en los tres años posteriores a los ataques del 11 de septiembre de 2001, en Estados Unidos.
El grupo de derechos humanos señaló que Jordania era el principal destino de las transferencias de la CIA, conocidas como “rendiciones”, entre los años 2001 y 2004.
El documento, llamado "Double Jeopardy: CIA Renditions to Jordan", señala que el Departamento de Inteligencia de Jordania sirvió como carcelero e interrogador de la CIA.
También alega que los sospechosos fueron torturados en Jordania.
El informe indica que aunque un puñado de países recibió este tipo de sospechosos de Estados Unidos, Jordania es la nación que recibió el mayor número.