En India, las mayores ciudades están en estado de alerta máximo, un día después que una serie de ataques explosivos matara a por lo menos 80 personas e hiriera a más de 200, en el occidental estado de Rajastán.
Siete bombas estallaron en Jaipur, la capital de Rajastán el martes, en un lapso de 12 minutos.
Los atentados ocurrieron durante la hora vespertina de mayor tránsito, cerca de un templo hindú y varios concurridos mercados.
Este miércoles, las calles en Jaipur estaban desiertas, porque las autoridades impusieron un toque de queda de un día, en la ciudad turística.
La policía está tratando de evitar confrontaciones entre la mayoría hindú y la minoría musulmana de la ciudad.
La policía detuvo a por lo menos dos personas, para interrogarlas.