Gobernantes de 11 países de América Latina hablaron ante la Asamblea General de las Naciones Unidas, el miércoles, discutiendo temas que incluyeron los esfuerzos de la ONU por reducir la pobreza mundial y las preocupaciones por la seguridad y el tráfico de narcóticos.
El presidente de Costa Rica, Oscar Arias dijo que millones de personas no podrán cubrir sus necesidades básicas debido al hambre, lo que describió como un “monstruo abominable”.
Arias indicó que una sexta parte de la población del mundo vive con menos de un dólar por día y que una fracción del dinero usado en gastos militares podría ser empleado para el alfabetismo, la erradicación de enfermedades prevenibles y para proveer agua potable y electricidad a quienes necesitan esos recursos.
Por otra parte, el presidente costarricense pidió apoyo para un tratado de armas que Costa Rica patrocina con el fin de prohibir la transferencia de armas a países o personas que intenten usarlas para violar los derechos humanos o las leyes internacionales.
Anteriormente, el presidente de Guatemala, Álvaro Colom, habló sobre los esfuerzos de su país para mejorar el cuidado de salud de sus ciudadanos y proveer educación para los niños.
Colom también agradeció a Colombia por apoyar los esfuerzos de Guatemala en la lucha contra el tráfico de drogas.
El presidente de Colombia, Álvaro Uribe, dijo a la Asamblea General de la ONU que su país está tomando medidas para contrarrestar el tráfico de drogas, pero que la comunidad internacional debe trabajar junta para confrontar el problema.
El presidente de El Salvador, Elías Antonio Saca, habló sobre los esfuerzos de su país para cumplir con las metas de desarrollo del milenio establecidas por la ONU para reducir la pobreza para 2015.
Otros presidentes que hablaron el miércoles fueron el mandatario hondureño, José Manuel Zelaya, y el vicepresidente cubano, José Ramón Machado Ventura.
También el presidente dominicano, Leonel Fernández, el mandatario paraguayo, Fernando Lugo, la presidenta de Chile, Michelle Bachelet y el gobernante mexicano, Felipe Calderón.