Algunos miembros del Congreso se cuestionan cómo evitar que los fondos para armas y entrenamiento que ha solicitado el presidente Barack Obama para la oposición siria lleguen a las manos equivocadas.
La portavoz del Departamento de Estado, Marie Harf, recalcó ayer que EE.UU. verificará que la ayuda a la oposición siria llegue exclusivamente a sus miembros a través de un proceso coordinado con el consejo militar supremo.
"Para mitigar el riesgo de que la asistencia caiga en las manos equivocadas, todas las unidades moderadas que están recibiendo o van a recibir nuestra asistencia son examinados a través de un proceso formal", dijo.
"Tenemos en marcha un proceso y es coordinado con el consejo militar supremo", agregó.
El Secretario de Estado, John Kerry, señaló que EE.UU. espera reclutar combatientes de la oposición siria moderada y entrenarlos para combatir contra los extremistas sunitas del Estado Islámico de Irak y el Levante.