El Senado estatal de California aprobó una ley que impide que inmigrantes indocumentados sean detenidos con la finalidad de deportarlos cuando se les arresta por un delito menor.
En virtud del denominado programa Comunidades Seguras, quienes no cuenten con documentación legal para estar en el país deben ser retenidos por las autoridades de inmigración.
Sin embargo, según alegó el senador demócrata de California Kevin de León, que presentó la ley, inocentes pagaron por pecadores puesto que de cada 10 personas que fueron deportadas como resultado de ese programa siete no eran responsables de ningún delito mayor.
De León citó casos de personas que fueron incluidos en procesos de deportación debido a hechos de violencia doméstica e infracciones menores de tránsito como conducir vehículos con las luces traseras rotas.
A juicio del senador la ley, que debe regresar a la Asamblea para una votación final, contribuiría a mejorar la seguridad pública porque en la situación actual los inmigrantes "están perdiendo la fe en las instituciones del orden".
La legislación no impide que los indocumentados sospechosos de delitos mayores sean detenidos para deportación ni que los convictos por estas causas sean deportados al término de sus condenas.
En virtud del denominado programa Comunidades Seguras, quienes no cuenten con documentación legal para estar en el país deben ser retenidos por las autoridades de inmigración.
Sin embargo, según alegó el senador demócrata de California Kevin de León, que presentó la ley, inocentes pagaron por pecadores puesto que de cada 10 personas que fueron deportadas como resultado de ese programa siete no eran responsables de ningún delito mayor.
De León citó casos de personas que fueron incluidos en procesos de deportación debido a hechos de violencia doméstica e infracciones menores de tránsito como conducir vehículos con las luces traseras rotas.
A juicio del senador la ley, que debe regresar a la Asamblea para una votación final, contribuiría a mejorar la seguridad pública porque en la situación actual los inmigrantes "están perdiendo la fe en las instituciones del orden".
La legislación no impide que los indocumentados sospechosos de delitos mayores sean detenidos para deportación ni que los convictos por estas causas sean deportados al término de sus condenas.