Un hombre británico fue detenido en Londres acusado de penetrar las redes informáticas del ejército estadounidense, la NASA y la Agencia de Protección del Medio Ambiente de las cuales robó información.
Lauri Love, de 28 años, fue arrestado en su casa situada a unos 128 kilómetros al norte de Londres con base a un requerimiento de una corte de Newark, Nueva Jersey.
El ciberpirata y un socio robaron información sobre empleados de gobierno, incluyendo miembros del ejército, desde al menos octubre de 2012. De acuerdo al gobierno de Estados Unidos, el robo le costó millones de dólares.
Love dejó “puertas traseras” por las cuales tenía pensado regresar a recoger más información.
La acusación establece que el propósito de Love era “entorpecer las operaciones e infraestructura” del gobierno federal, pero no lo acusa de intentar vender la información o hacer nada más con ella.
El documento incluye partes de mensajes instantáneos entre Love y sus socios. En uno de ellos se jactan de haber infiltrado la NASA.
Las leyes británicas permiten el arresto de personas que inicien ciberataques desde Gran Bretaña a cualquier parte del mundo. Será enjuiciado en Nueva Jersey porque uso un servidor en Parsippany, ciudad situada a unos 29 kilómetros de Newark, pero también encara cargos en Virginia por otras intrusiones.
Lauri Love, de 28 años, fue arrestado en su casa situada a unos 128 kilómetros al norte de Londres con base a un requerimiento de una corte de Newark, Nueva Jersey.
El ciberpirata y un socio robaron información sobre empleados de gobierno, incluyendo miembros del ejército, desde al menos octubre de 2012. De acuerdo al gobierno de Estados Unidos, el robo le costó millones de dólares.
Love dejó “puertas traseras” por las cuales tenía pensado regresar a recoger más información.
La acusación establece que el propósito de Love era “entorpecer las operaciones e infraestructura” del gobierno federal, pero no lo acusa de intentar vender la información o hacer nada más con ella.
El documento incluye partes de mensajes instantáneos entre Love y sus socios. En uno de ellos se jactan de haber infiltrado la NASA.
Las leyes británicas permiten el arresto de personas que inicien ciberataques desde Gran Bretaña a cualquier parte del mundo. Será enjuiciado en Nueva Jersey porque uso un servidor en Parsippany, ciudad situada a unos 29 kilómetros de Newark, pero también encara cargos en Virginia por otras intrusiones.