En Venezuela, a pesar de las dificultades, este año, muchas personas hicieron un esfuerzo adicional para mantener el ánimo arriba y evitar que la crisis económica les impida celebrar el carnaval.
La tradición de los disfraces y el esplendor del carnaval, debido a la crisis económica que atraviesa la nación sudamericana, para varios consultados, este año no se ha sentido como los anteriores. Afirman que, ante la situación que impacta a la mayoría de la población, se deben establecer prioridades.
“En el pasado pienso que la gente disfrutaba más del carnaval, con esta crisis la gente ni disfraces te puedes poner, o comemos, o te compro el disfraz, ahora se hacen disfraces más sencillos, dentro de su alcance”, afirma María Luisa Perez, una de las ciudadanas consultadas.
Por su parte, Hernán Hernández afirma que: “antes las fiestas eran más concurridas, había más comparsas, la gente estaba como más alegre, se podían comprar más cosas porque no teníamos una hiperinflación tan elevada, uno se podía comprar un disfraz, uno a los niños y no te afectaba en tu cesta familiar”.
Sin embargo, el joven zanquero [que anda en zancos] Domingo Ramírez aseguró que, a pesar de las adversidades y la actual situación del país, hay que mantener las tradiciones del Carnaval.
“Es muy bueno que la gente se anime, aunque sabemos que todo está un poco débil, en el sentido de ánimo pero la gente contribuye a que la gente siga en esta tradición”, aseguró Ramírez.
Entre tanto, el presidente en disputa del país, Nicolás Maduro, ordenó decorar algunos espacios de Caracas para llevar a cabo los denominados “Carnavales felices 2020” y concedió un día adicional de asueto a empleados públicos y privados.
