La entrega de diafragmas anticonceptivos a las trabajadoras sexuales no tendría la consecuencia adversa de reducir el uso de preservativos, según indicó una investigación.
Según el estudio, realizado a 140 trabajadoras sexuales de Kenia, reveló que luego de recibir los diafragmas y consejería en el uso del preservativo y las prácticas sexuales seguras, sus conductas de riesgo disminuyeron en los siguientes seis meses.
La investigación, realizada por la doctora, María F. Gallo, de los Centros para el Control para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC por sus siglas en ingles), la práctica de las trabajadoras sexuales incluyó un aumento de la frecuencia en el uso del preservativo y una reducción de la cantidad de parejas sexuales informadas.
Al inicio del estudio, las mujeres utilizaron el preservativo en un 56 por ciento de las veces, mientras, que a los seis meses, el uso aumentó a un 68 por ciento.
La cantidad de parejas disminuyó de cinco durante las dos semanas previas, a cuatro al final del estudio.
Los resultados, publicados en la revista de la Asociación Estadounidense de Epidemiogía, demostraron que entregarles diafragmas a las trabajadoras sexuales no hace que se olviden del preservativo y reduce el riesgo de adquirir VIH y otras infecciones de transmisión sexual.
Los investigadores están buscando alternativas al preservativo para controlar la diseminación del VIH en lugares como África.
Esa búsqueda incluye el estudio de la utilidad de métodos femeninos "controlados", como el preservativo femenino y los diafragmas, para proteger a las mujeres con parejas que no usan preservativos.
A su vez, los investigadores dijeron que los diafragmas evitarían que el virus llegue al cuello uterino.
Sin embargo, el único ensayo clínico realizado reveló que entregarles diafragmas a las africanas para que los utilicen con preservativo no modifica la tasa de transmisión del VIH con respecto del uso del preservativo solamente.
Un 54 por ciento dijo que utilizó el preservativo durante la última relación sexual, comparado con el 85 por ciento del grupo que sólo usó el preservativo.