Un juez federal estadounidense dictaminó que la Agencia Central de Inteligencia (CIA), no tiene que revelar cientos de documentos relacionados con el interrogatorio a sospechosos de terrorismo retenidos en el extranjero bajo el programa de detención de la agencia.
En su fallo, el juez de Nueva York, Alvin Hellerstein, dio a la CIA la autorización para determinar si los documentos deben permanecer secretos.
La orden judicial frena el pedido de la Unión de Libertades Civiles de Estados Unidos (ACLU, por sus siglas en inglés) que solicitó sean revelados 580 documentos que incluyen nombres y fechas de captura de detenidos, así como la descripción de cintas de video destruidas que mostraban interrogaciones de la CIA a dos sospechosos.
Voceros de la organización expresaron desaliento por el dictamen y agregaron que no estaban de acuerdo con las excesivas restricciones impuestas por el magistrado.