Una severa tormenta azotó la zona central de Estados Unidos con vientos huracanados que derribaron postes del tendido eléctrico, árboles y ocasionaron la suspensión de numerosos vuelos en el congestionado aeropuerto internacional O´Hare de Chicago.
El Servicio Meteorológico Nacional advirtió del peligro de vientos sostenidos de hasta 65 kilómetros por hora y ráfagas de 100 kilómetros por hora. Además se reportó la formación de al menos de un tornado cerca de Peotone, en el área metropolitana de Chicago.
El area de mal tiempo comprendió una extensa zona desde las Dakotas en el centro-norte del país hasta el este de los Grandes Lagos, y se emitieron alertas de vientos peligrosos y tornados para varios estados además de Illinois: Indiana, Kentucky, Michigan, Ohio y Wisconsin.
La fuerza de los vientos registrados en Illinois alcanzó proporciones fuera de lo común, y de acuerdo con un vocero del Servicio Meteorológico, la magnitud de la tormenta se compara a la de un huracán de categoría 2 o 3 en la escala Saffir-Simpsom, lo que podría constituir un récord histórico para el área.
Un portavoz de la Administración Federal de Aviación informó que debido al mal tiempo se retrasaron algunos vuelos en el Aeropuerto Internacional de Indianapolis, y en el de Minneapolis-St.Paul hubo que cerrar al tráfico aéreo tres pistas.
En los estados de Indiana e Illinois y en el área de la ciudad de St. Louis, en Missouri, más de 80 mil hogares y negocios se quedaron sin suministro de electricidad.