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Analistas celebran que el último debate presidencial haya atendido las inquietudes de los hispanos


El candidato presidencial demócrata Joe Biden, a la izquierda, y el presidente Donald Trump participan en su segundo debate presidencial, celebrado en Nashville, Tennessee.
El candidato presidencial demócrata Joe Biden, a la izquierda, y el presidente Donald Trump participan en su segundo debate presidencial, celebrado en Nashville, Tennessee.

Expertos políticos consultados por la Voz de América se mostraron satisfechos con el segundo y último debate presidencial en el que se abordaron temas de interés para la comunidad latina en Estados Unidos, como la inmigración, la reforma sanitaria y la lucha contra la COVID-19.

No estaba previsto en la agenda de temas, pero la cuestión migratoria fue introducida por sorpresa por Kristen Welker, la moderadora del segundo debate presidencial entre Donald Trump y Joe Biden. El republicano y el demócrata aportaron sus puntos de vistas sobre una problemática que, según ellos, atañe principalmente a los latinos en Estados Unidos.

“Me alegra que finalmente, a 12 días de la elección, se hable de un tema que ha estado totalmente ausente”, comentaba Javier Maza, estratega político demócrata en declaraciones a la Voz de América.

Trump y los niños migrantes separados de sus padres

Sobre la situación de los más de 500 niños que fueron separados de sus familias en la frontera cuyos padres no han sido aún localizados, el presidente se limitó a decir que el gobierno norteamericano “los está cuidando muy bien” y justificó que en esos casos los niños “vinieron a través de coyotes”.

“Yo creo que lo podría haber defendido de una forma más concreta y he echado en falta una postura que, aunque creo que la tiene muy en firme, cuesta transmitir”, subrayaba Manuel Zalba, abogado y analista de tendencia republicana.

Al periodista Alex Segura, miembro de la junta directiva de la Asociación de Corresponsales Extranjeros en Estados Unidos, le ha “sorprendido” que el mandatario no hubiera ahondado más en “la reunificación familiar, que es una de las cuestiones que más problemas le ha causado entre sus votantes”, identificados con temas que tienen que ver con la familia o la religión.

Biden propone reforma en 100 días, Trump pregunta porqué no se hizo antes

Por su parte, el candidato demócrata aprovechó la introducción de esta cuestión para anunciar una reforma migratoria que ha suscitado división de opiniones entre los analistas políticos consultados.

Biden dijo que presentaría una propuesta de reforma migratoria en los primeros 100 días de gobierno en caso de que llegue a la Casa Blanca. ¿Con qué objetivo? Para regularizar, según dijo, a casi 11 millones de indocumentados en Estados Unidos, entre ellos los beneficiarios de la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA).

“Biden sí que ha sido un poco atrevido, pero eso marca una línea que el Partido Demócrata ha ido trabajando durante estos últimos cuatro años respecto a crear una vía a la ciudadanía para personas indocumentadas”, apuntó Segura.

Para Zalba, sin embargo, esa propuesta para legalizar a los inmigrantes sin papeles es “populista” y recuerda que “con las mayorías que hay ahora en el Congreso no sería posible” que se llevara a cabo.

El presidente Trump también recordó a Biden que no hizo "nada" para reformar la política migratoria del país durante los ocho años que fue la mano derecha del presidente Obama, entre 2009 y 2017, y defendió que la frontera del país es actualmente "más fuerte".

Maza dijo que la cuestión migratoria es “un tema que une y desune” al electorado de ambos partidos. En ese sentido, recordó que “hay miles y miles de familias que, si bien tienen su camino de la inmigración totalmente pavimentado y resuelto, tienen algún familiar que ni siquiera tiene la residencia o están en la ilegalidad”. Por eso está convencido de que, en muchas ocasiones, acaba siendo un discurso que influye en los votantes.

La sanidad, otro tema de interés para la comunidad hispana

La reforma sanitaria y el futuro de la ley de reforma de salud integral, también conocida como 'Obamacare', fue otro de los temas abordados en este segundo debate presidencial celebrado este jueves en la universidad de Belmont, en Nashville, Tennessee.

Trump se comprometió a impulsar un proyecto de salud que “proteja a las personas con enfermedades preexistentes” mientras que el demócrata propuso su 'Bidencare' en el que promulgaría un plan para bajar el precio de los fármacos. El candidato republicano rechazó esa medida y acusó a su adversario de querer una “medicina socializada”.

Según Maza, el analista demócrata, “Biden tuvo una muy buena salida porque le dijo: «yo veo que el seguro de salud como un derecho, no como un privilegio»”.

Segura, en ese sentido, lamentó que Trump no miró “hacia adelante” para plantear sus propuestas sanitarias de cara a un segundo mandato y que, por el contrario, “ha repasado lo que básicamente ha hecho en estos cuatro años, que ha sido eliminar en gran parte el Obamacare”.

“No ha planteado ninguna solución de futuro, y eso ha sido la tónica del debate de hoy”, agregó.

Al mismo tiempo, Zalba destacó las palabras del presidente en su intervención al abordar este tema: “Se iba a comprometer a proteger a los pacientes con condiciones médicas preexistentes, y nadie en su sano juicio puede estar en contra de esa postura”, razonó el especialista.

Un debate no decide las elecciones

Los expertos políticos coincidieron al señalar que este debate, con muchas menos interrupciones y ataques personales que en el primero, “no va a servir para que los electores decidan su voto”.

“Muchos de los electores ni siquiera llegan a ver el debate y los que lo ven, lo hacen más porque se parece a un reality show que porque crean que les puede cambiar el sentido del voto”, manifestó Zalba.

Maza también cree que esta última batalla dialéctica entre ambos candidatos “no va a cambiar la ruta de esa elección” porque “no se rompió nada” y “se vio más de lo mismo”.

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