Peluquerías y barberías de varios países comenzaron a recibir clientes en los últimos días, luego de que los gobiernos iniciaran la reapertura de sus economías.
La nueva realidad, en medio del riesgo de contagio de coronavirus, impone medidas de prevención como barreras plásticas entre sillones, desinfección de los espacios al terminar, guantes y mascarillas para clientes y empleados. Las imágenes muestran cómo estos negocios en Singapur, Turquía y Francia han comenzado a adaptarse.
