Una corte federal de apelaciones va a escuchar el viernes los argumentos sobre el intento de el exasesor del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, por obligar a que una corte en primera instancia desestime el caso del Departamento de Justicia en su contra.
La audiencia, que será frente a un panel de tres jueces en la corte de apelaciones del Distrito de Columbia, es el próximo capítulo en el caso legal contra Flynn, quien se declaró culpable de mentir al FBI sobre sus contactos con Rusia antes de que Trump asumiera la presidencia en enero del 2017.
Flynn solicitó a un tribunal de apelaciones que obligue al juez que lleva su caso, Emmet Sullivan, a aceptar una polémica solicitud del departamento de Justicia de abandonar el caso, y que ha sido criticada por exjueces y fiscales.
A principios de mayo, el departamento de Justicia, liderado por el secretario William Barr, pidió retirar los cargos contra Flynn, después de una campaña de presión por parte de Trump y sus aliados políticos.
En los documentos presentados ante la Corte del Distrito de Columbia, el departamento de Justicia dice que, después de haber revisado todos los hechos del caso, incluyendo detalles recientemente “presentados y divulgados”, el gobierno concluyó que “la entrevista al señor Flynn no estaba conectada con, ni justificada por la investigación de contrainteligencia del FBI”.
“El gobierno no está convencido de que la entrevista del 24 de enero del 2017 se realizó con una base investigativa legítima y, por lo tanto, no cree que las declaraciones del señor Flynn fueran relevantes, incluso si son ciertas”, escribió el departamento. El juez que lleva el caso, Emmet Sullivan, todavía debe decidir si aceptar o no la moción del gobierno.
El miércoles, John Gleeson, un exjuez del departamento de Justicia que fue llamado por Sullivan para participar como “amigo de la corte” en el caso, instó al tribunal a no permitir que se desestime el caso de Flynn, citando evidencia de un “grave abuso de poder judicial”.
"El departamento de Justicia tiene la solemne responsabilidad de procesar este caso, como cualquier otro caso, sin temor ni favor", escribió Gleeson.
"Ha abdicado de esa responsabilidad mediante un grave abuso del poder de la fiscalía, intentando brindar un trato especial a un amigo favorito y aliado político del presidente de Estados Unidos", argumentó el exjuez.
Flynn, un exgeneral, fue uno de los seis socios de Trump acusados en la investigación del abogado especial Robert Mueller sobre los lazos entre Rusia y la campaña de Trump del 2016. La acusación lo encontró culpable de mentir al FBI y a altos cargos del gobierno, como el vicepresidente, Mike Pence, sobre sus vínculos con el embajador de Rusia, Serguéi Kilisak.
Trump despidió a Flynn de su cargo, en el que solo duró 24 días, después de que la información de sus contactos con el embajador salió a a luz.
Flynn había entrado en un acuerdo de culpabilidad con los fiscales dentro del que se suponía debía cooperar con la justicia. Sin embargo, decidió cambiar de enfoque y de abogados y alegar que había sido presionado para mentir sobre sus reuniones en el 2016 con Kilisak.