"Por esa masacre, por las aberrantes violaciones de los derechos humanos y por los abusos perpetrados, en nombre del Estado salvadoreño pido perdón a las familias de las víctimas", afirmó Mauricio Funes durante el acto de conmemoración del aniversario 20 de los Acuerdos de Paz.
"Pido perdón a las madres, padres, hijos, hijas, hermanos, hermanas que no saben hasta el día de hoy el paradero de sus seres queridos. Pido perdón al pueblo salvadoreño que fue víctima de la violencia atroz e inaceptable", reiteró el mandatario a los miles de campesinos que llegaron al caserío El Mozote.
La de El Mozote fue una de las masacres más atroces durante la guerra civil que vivió ese país durante cerca de 12 años de conflicto bélico. Allí murieron cerca de 450 niños.
"Aqui se exterminó a casi un millar de salvadoreñas y salvadoreños, la mitad de ellos niños menores de 18 años. Aquí se cometió el peor de los pecados, del que hasta hoy, como Estado, como sociedad, no nos habíamos arrepentido", agregó.
Entre el 11 y 13 de diciembre de 1981, esa localidad fue escenario de una operación delhoy extinto batallón Atlacatl en la que alrededor de un millar de personas fueron asesinadas.
Muchos de los cadáveres resultaron abandonados al interior de una pequeña iglesia que luego fue incendiada.
"Aquí, en El Mozote y comunidades vecinas, hace poco más de 30 años, se consumó una desmesura criminal que se pretendió negar y ocultar sistemáticamente. Aquí en tres días y tres noches, se perpetró la más grande masacre contra civiles de la historia contemporánea latinoamericana", afirmó el mandatario.
Según el informe de la comisión de la verdad, soldados entrenados por Estados Unidos ingresaron a la zona en busca de guerrilleros del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), pero en la incursión mataron a los civiles que encontraron en el lugar.