La congresista demócrata por Arizona Gabrielle Giffords voló a Tucson, Arizona, para una visita de fin de semana, la primera que hace a su estado desde que el 8 de enero pasado recibió un tiro en la cabeza frente a un supermercado de esa ciudad.
Giffords fue dada de alta el miércoles del hospital donde recibió tratamiento médico en Houston, Texas, pero durante su estancia en Tucson no hará ninguna aparición pública ni concederá entrevistas a la prensa, según informó su oficina.
Un comunicado del hospital indicó previamente que la congresista residirá por el momento en Houston, donde continuará su rehabilitación en el hospital TIRR Memorial Hermann.
“Habíamos estado soñando con este viaje desde hace algún tiempo (…) sus médicos han dicho que el regreso a su ciudad podría jugar un importante papel en su recuperación”, dijo el astronauta Mark Kelly, esposo de la congresista.
Giffods fue baleada a quemarropa en la cabeza por un individuo que abrió fuego contra ella y otras personas durante un evento político en la calle. El ataque causó la muerte a seis personas, incluyendo un juez federal, una niña y un ayudante de la congresista, y dejó a 12 heridas.
El agresor, Jared Loughner, de 22 años, fue declarado mentalmente incompetente para encarar juicio y enviado el mes pasado a un hospital para prisioneros federales en Missouri.
