El izquierdista primer ministro griego, Alexis Tsipras, se proclamó victorioso en las elecciones nacionales del domingo, anunciando que formara rápidamente una coalición de gobierno para implementar las medidas de austeridad demandadas por la Unión Europea.
El líder del Partido Syriza, se dirigió a la multitud en el centro de Atenas, solo horas después de que los votantes rechazaran un intento conservador de tomar el control del gobierno.
“A partir de mañana nos arremangamos y trabajamos duro para apoyar a los más débiles, las clases trabajadoras, para subir el sol sobre nuestra nación", dijo el primer ministro Tsipras.
"Por una Grecia de igualdad, justicia, progreso social, justicia social y prosperidad de nuestro país. Para ser capaces de tener una Grecia más fuerte y más justa luego de cuatro años y hacer que nuestro pueblo se sienta orgulloso y erguido de nuevo", agregó.
Con el 90 por ciento del escrutinio, Syriza logra el 35,5% de los votos (145 escaños), mientras los conservadores de Nueva Democracia se situaban en torno al 28%. La ultraderecha revalidó su tercer puesto con un leve aumento de apoyos, mientras quedó fuera del Parlamento Unidad Popular, la escisión de Syriza tras la firma del rescate.
La formación de una nueva coalición de gobierno y el entendimiento con sus acreedores internacionales y europeos se podría ver complicada por la dramática crisis migratoria que ahora les separa aún más.