La periodista venezolana de Globovisión, Nairobi Pinto, secuestrada la semana pasada, fue liberada este lunes en la población de Cúa, en el estado de Miranda en horas de la madrugada.
La periodista llegó caminando hasta una sede de Protección Civil y luego fue trasladada a la sede del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC), donde dio detalles de su cautiverio.
Horas más tarde, Nairobi se presentó en conferencia de prensa junto al ministro del Interior, Miguel Rodriguez Torres, pero no quiso dar mayores detalles sobre su cautiverio.
El ministro, aunque dijo no querer especular, planteó la pregunta de quién, en un caso tan delicado, gana con este secuestro.
"Normalmente un caso como este busca un fin económico –dijo el ministro—, pero ella no solo es periodista, es coordinadora de la pastoral juvenil de la Iglesia Católica y estudiante universitaria. Entonces, ¿quién gana con esta acción?”, se preguntó.
“En la medida que podamos ir dando respuesta a esta pregunta, vamos a ir avanzando en la investigación”, añadió Rodríguez Torres.
La periodista dijo no haber sido maltratada, ni tocada, tuvo buen trato y la "alimentaron los tres tiempos".
Ante las especulaciones de que el secuestro lo pudo haber llevado a cabo un grupo policial, dijo no poder confirmarlo, porque nunca vio a sus captores ya que estuvo vendada de los ojos y los plagiarios no hablaban en su presencia.
Pinto desapareció el pasado domingo 6 de abril, cuando fue interceptada en su residencia por hombres encapuchados armados.
La periodista llegó caminando hasta una sede de Protección Civil y luego fue trasladada a la sede del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC), donde dio detalles de su cautiverio.
Horas más tarde, Nairobi se presentó en conferencia de prensa junto al ministro del Interior, Miguel Rodriguez Torres, pero no quiso dar mayores detalles sobre su cautiverio.
El ministro, aunque dijo no querer especular, planteó la pregunta de quién, en un caso tan delicado, gana con este secuestro.
"Normalmente un caso como este busca un fin económico –dijo el ministro—, pero ella no solo es periodista, es coordinadora de la pastoral juvenil de la Iglesia Católica y estudiante universitaria. Entonces, ¿quién gana con esta acción?”, se preguntó.
“En la medida que podamos ir dando respuesta a esta pregunta, vamos a ir avanzando en la investigación”, añadió Rodríguez Torres.
La periodista dijo no haber sido maltratada, ni tocada, tuvo buen trato y la "alimentaron los tres tiempos".
Ante las especulaciones de que el secuestro lo pudo haber llevado a cabo un grupo policial, dijo no poder confirmarlo, porque nunca vio a sus captores ya que estuvo vendada de los ojos y los plagiarios no hablaban en su presencia.
Pinto desapareció el pasado domingo 6 de abril, cuando fue interceptada en su residencia por hombres encapuchados armados.
