En la inusual conversación habrían hablado sobre la reforma inmigratoria y otros asuntos de comercio que tienen pocas probabilidades de avanzar este año.
Ni Obama ni Boehner han dicho nada al respecto ni parecen haberse producido avances, pero sus colaboradores calificaron el encuentro de “constructivo”.
Agregaron que además de inmigración y comercio, los dos líderes conversaron sobre la industria manufacturera, los seguros de salud, la ley de salud, presupuestos, ayuda para la sequía en California, incendios forestales y un proyecto de ley para construcción de autopistas.
El otro aspecto importante que resaltaron es que la conversación se dio en momentos en que no hay ninguna crisis que se cierna en el horizonte.