Un nuevo reporte de la agencia de Naciones Unidas para las mujeres indicó que las familias pueden ser entornos de amor, cuidado y realización personal, pero con demasiada frecuencia también son espacios donde se vulneran los derechos de las mujeres y las niñas, donde se ahogan sus voces y donde prevalece la desigualdad de género.
La directora ejecutiva de ONU Mujeres, Phumzile Mlambo-Ngcuka, dijo en la presentación del reporte "Familias en un mundo cambiante" que sigue ocurriendo la "perturbadora perversidad de la violencia en la pareja".
La directora ejecutiva de ONU Mujeres puso de ejemplo 2017, cuando fueron asesinadas cada día 137 mujeres por un familiar.
El reporte reconoce la importancia vital de las familias en la cultura y la economía. A la vez sostiene que en todas las regiones hay esfuerzos concertados para negarles autonomía a las mujeres y el derecho a que tomen sus propias decisiones en el nombre de la protección de los "valores familiares".
"Hoy estoy aquí para decir que esto no es aceptable y no puede permitirse", expresó Mlambo-Ngcuka. "Las mujeres de todo el mundo, y sus aliados, no permitirán un retroceso de todo lo que hemos logrado".
Pese a los grandes avances en la eliminación legal de la discriminación de género, comentó, "no es casualidad" que el progreso más lento se haya dado en las leyes familiares que rigen el derecho de la mujer a decidir con quién y cuándo casarse, su derecho a divorciarse y a heredar dinero y propiedades.
El texto indica que las familias homosexuales son cada vez más visibles en todas las regiones. El texto señaló que hasta abril 42 países de todo el mundo permiten el matrimonio o las uniones civiles gays.
Sin embargo, apunta el reporte, todavía 68 naciones penalizan las relaciones consentidas entre personas del mismo sexo, y en 11 de ellos este tipo de relaciones pueden conllevar la pena de muerte.