La salud física y mental del expresidente egipcio Hosni Mubarak, ha empeorado luego de conocerse su condena a cadena perpetua, emitida el pasado sábado por un tribunal de El Cairo.
Este miércoles, funcionarios del hospital de la Prisión de Tora, donde se encuentra internado Mubarak, aseguraron que la salud del ex mandatario no ha presentado mejoría en relación al sábado pasado cuando fue internado.
Fuentes anónimas de la prisión, aseguraron que tiene serios problemas respiratorios, por lo que ha tenido que mantenerse con un respirador artificial en las últimas horas.
Añadieron que el ex líder egipcio de 84 años, desde que fue detenido, ha sufrido de depresión severa, pérdida de peso y actualmente tiene dificultades para caminar, padece de un shock nervioso y presión alta.
Hosni Mubarak, se encuentra en prisión por ser el responsable de la muerte de al menos 800 personas durante la revuelta entre rebeldes y simpatizantes del gobierno, que lo obligó a dejar el poder, en el 2011.
Los hijos del expresidente egipcio, Alaa (un pudiente hombre de negocios) y Gamal, también se encuentran recluidos en la Prisión de Tora. Junto con sus esposas fueron exonerados de los cargos de corrupción en su contra y ahora serán juzgados por tráfico de información privilegiada.
El crítico estado de salud de Mubarak, llevó al Servicio de Prisiones de Egipto a estudiar la posibilidad de trasladarlo a un hospital.
Mientras se conoce la decisión sobre su traslado, Mohamed Naguib, jefe del Departamento de Prisiones del Ministro, ordenó cambiar de sección a Gamal uno de los hijos de Mubarak, al pabellón de su padre para acompañarle.
Por su parte, el centro penitenciario autorizó el envío de un equipo médico, especialista en problemas cardiacos, para ponerlo a disposición del expresidente mientras mejora o se decide su traslado a un hospital.
Este miércoles, funcionarios del hospital de la Prisión de Tora, donde se encuentra internado Mubarak, aseguraron que la salud del ex mandatario no ha presentado mejoría en relación al sábado pasado cuando fue internado.
Fuentes anónimas de la prisión, aseguraron que tiene serios problemas respiratorios, por lo que ha tenido que mantenerse con un respirador artificial en las últimas horas.
Añadieron que el ex líder egipcio de 84 años, desde que fue detenido, ha sufrido de depresión severa, pérdida de peso y actualmente tiene dificultades para caminar, padece de un shock nervioso y presión alta.
Hosni Mubarak, se encuentra en prisión por ser el responsable de la muerte de al menos 800 personas durante la revuelta entre rebeldes y simpatizantes del gobierno, que lo obligó a dejar el poder, en el 2011.
Los hijos del expresidente egipcio, Alaa (un pudiente hombre de negocios) y Gamal, también se encuentran recluidos en la Prisión de Tora. Junto con sus esposas fueron exonerados de los cargos de corrupción en su contra y ahora serán juzgados por tráfico de información privilegiada.
El crítico estado de salud de Mubarak, llevó al Servicio de Prisiones de Egipto a estudiar la posibilidad de trasladarlo a un hospital.
Mientras se conoce la decisión sobre su traslado, Mohamed Naguib, jefe del Departamento de Prisiones del Ministro, ordenó cambiar de sección a Gamal uno de los hijos de Mubarak, al pabellón de su padre para acompañarle.
Por su parte, el centro penitenciario autorizó el envío de un equipo médico, especialista en problemas cardiacos, para ponerlo a disposición del expresidente mientras mejora o se decide su traslado a un hospital.