Citando el alto costo de vida y la inflación, caseros en Nueva York lograron que la junta de rentas de la ciudad incremente las rentas estabilizadas a cerca de un millón de viviendas, que irán del 2 al 5 % por contratos de un año y del 4 al 7 % para aquellos de dos años.

“El problema es que uno trabaja y el dinero que uno gana va a la renta y ahora van a subir más y no suben el pago. Parece que en la ciudad de Manhattan está yendo para la gente rica y no más para la gente de media y eso es un problema bien grande porque nos quieren tirar ya afuera de la ciudad de Manhattan”, comenta Mónica, Residente de Nueva York.

Un proyecto de ley estancado en la legislatura estatal podría ser el salvavidas de muchos inquilinos.

“Lo que realmente necesitamos para los inquilinos es una buena causa de desalojo que limitará el nivel de aumento del alquiler y protegerá a las personas de desalojos injustos”, afirma Judith Goldiner, Abogada Legal Aid Society.

Pero la gobernadora Kathy Hochul ha dicho que se enfocará en otro plan para generar 800.000 nuevas viviendas. Una decisión más detallada sobre cómo se implementarán los nuevos aumentos se conocerá en el mes de junio. Entre tanto, muchos como Pedro no se dan abasto para pagar el alquiler.

“Para vivir muy estable se necesita tener dos trabajos, porque con un trabajo no te alcanza para más, porque la renta cuesta un poco más cara”, dice Pedro, Residente de Nueva York.

Según el sitio de rentas Zillow, el alquiler promedio en Nueva York es de 3.500 dólares mensuales mientras que el salario mínimo se ha mantenido en 15 dólares la hora desde 2019. Ángela González, Voz de América, Nueva York.