El presidente Donald Trump dijo a los periodistas el jueves por la noche que estaba considerando al representante Douglas A. Collins, republicano por Georgia, como su director permanente de inteligencia nacional, una medida que Collins desestimó horas más tarde.
Collins es solo uno de los varios candidatos que está considerando, dijo el presidente, quien habló con los periodistas mientras volaba de Colorado a Nevada como parte de un viaje de cuatro días por el oeste.
Durante una aparición televisiva el viernes por la mañana, Collins dijo que lo llenaba de "humildad" estar entre los considerados por Trump, pero dijo que no quiere el trabajo.
Informes de prensa dan cuenta que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tomó la decisión de expulsar a su principal funcionario de inteligencia después de una sesión informativa clasificada a los legisladores sobre la seguridad electoral, según los informes.
La Casa Blanca anunció el jueves que el presidente nombró al embajador de los Estados Unidos en Alemania, Richard Grenell, un conocido partidario de Trump, para reemplazar al Director de Seguridad Nacional Joseph Maguire, quien ha ocupado el cargo desde agosto.
Los diarios The Washington Post y The New York Times informaron el jueves que el cambio se realizó después de que el presidente se enfureció al enterarse de la sesión informativa de la semana pasada a los miembros del Comité de Inteligencia de la Cámara.
Los informes dicen que uno de los asesores de Maguire les dijo a los legisladores que Rusia ha estado interfiriendo en la campaña presidencial de Estados Unidos en 2020, buscando que Trump sea reelegido. Según los informes, el presidente estaba preocupado porque los demócratas usarían la información en su contra en las elecciones de este año. Los informes dicen que Trump llamó a Maquire a su oficina y finalmente decidió reemplazarlo.
Los informes provocaron la indignación de los demócratas del Congreso y una negación del Kremlin. El portavoz Dmitry Peskov desestió los informes de intromisión rusa en las elecciones estadounidenses como una tontería política:
"Estos son anuncios más paranoicos que, a nuestro pesar, se multiplicarán a medida que nos acerquemos a las elecciones (de Estados Unidos). Naturalmente, no tienen nada que ver con la verdad".
Cuando fue contactada por VOA, la Oficina del Director de Inteligencia Nacional y su oficina de seguridad electoral declinaron hacer comentarios. Una solicitud de comentarios de la Casa Blanca también quedó sin respuesta.
