Los presidentes de América Latina están reunidos en Quito para la cumbre de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur). El presidente ecuatoriano Rafael Correa asumió su segundo período presidencial en la Unasur.
Uno de los temas principales en la mesa son los acuerdos militares entre Estados Unidos y Colombia. El presidente de Colombia decidió no asistir a la cumbre a causa del previo rompimiento de relaciones diplomáticas con Ecuador.
La decisión del gobierno colombiano de permitir a Estados Unidos usar siete bases militares provocó un fuerte debate, encabezado por Venezuela. Los cancilleres de Unasur publicaron una declaración, de la que por ahora quedó excluido un pedido de Bolivia para que se rechace el acuerdo entre Colombia y Estados Unidos.
Venezuela, que considera estos tratados ponen en gran riesgo la seguridad de América Latina, congeló relaciones políticas con Colombia, recientemente. Hugo Chávez, presidente de Venezuela, acusó al gobierno colombiano de ir en contra de la unidad del continente, “hay algunos que no quieren caminar, el gobierno de Colombia, por ejemplo, no quiere la unidad, está actuando contra la unidad”.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, dijo, en su intervención, “Tenemos que evitar que Colombia se convierta en un Israel".
En días anteriores los presidentes de Argentina y Brasil también expresaron sus reservas en cuanto a este tratado.
Sin embargo, más profundización en el tema se desarrollará en la reunión del 24 de agosto, en el Consejo de Ministros de Defensa de Unasur, dijo el presidente de Ecuador, Rafael Correa.
"Lo que no quiere ningún presidente es asistir a una cumbre y que lo sienten en la silla de los acusados", dijo el presidente de Paraguay, Fernando Lugo, al refereirse a las discusiones alrededor del acuerdo entre Colombia y Estados Unidos, y a la ausencia del presidente colombiano Álvaro Uribe.
En Unasur, las decisiones se toman por unanimidad, de allí la importancia de que cada país esté representado. En esta ocasión no solo el presidente colombiano estuvo ausente, sino también su homólogo peruano, Alan García, otro estrecho aliado de Washington.
Por otra parte, los cancilleres de Unasur pidieron oficialmente la restitución del depuesto presidente Manuel Zelaya en el gobierno de Honduras y a su vez indicaron que las elecciones, de ser realizadas bajo el gobierno de facto, no serán reconocidas.
Zelaya, quien está presente en esta reunión de Presidentes, que se realiza en el centro histórico de Quito, declaró que espera volver al poder “más pronto que tarde”.