Los líderes partidarios en el Senado de Brasil resolvieron postergar por una semana más la sesión para debatir y votar la moción de ingreso de Venezuela al Mercado Común del Sur (Mercosur). El propio presidente del senado de Brasil y expresidente brasileño, José Sarney fue encargado de hacer el anunciado. La sesión plenaria estaba prevista para este miércoles según se informó desde la cámara alta del Congreso.
Las razones que motivaron la postergación y que condujo a un acuerdo partidario para dilatar el debate por una semana más, fueron las recientes declaraciones del presidente venezolano, Hugo Chávez, convocando al ejército y a la ciudadanía para que se preparen "para la guerra" con Colombia, informó la agencia Senado,
Incluso el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado que el pasado 29 de octubre había aprobado el ingreso de Venezuela al bloque, sometiendo la iniciativa al pleno de la Cámara Alta, el senador Eduardo Azeredo, se manifestó "preocupado" con las declaraciones de Chávez. También el legislador recordó las críticas del mandatario venezolano al Senado brasileño, lo que ha generado una nueva ola de resistencias a apoyar la medida de integrar a Venezuela al bloque, a pesar del apoyo del gobierno del presidente Luiz Inácio Lula de Silva.
Más explícito aún fue el senador opositor Arthur Virgílio, quien dijo que "quien hable de guerra en América del Sur es, como mínimo, una persona peligrosa Los senadores deben meditar sobre las declaraciones del coronel Chávez", dijo el senador.
Venezuela adhirió al Mercosur en 2006 y su incorporación al bloque ya fue ratificada por los parlamentos de Argentina y Uruguay. Sin embargo la aprobación aún está pendiente en Brasil y Paraguay, donde el presidente venezolano Hugo Chávez ha realizado un fuerte cabildeo. En el año 2007 el senado brasileño ya había postergado la decisión después de que Chávez acusara a los legisladores de estar sometidos a Estados Unidos.
Este martes, ante las crecientes críticas a sus declaraciones, el presidente venezolano Hugo Chávez negó haber convocado a su país a prepararse para una eventual guerra con Colombia. El mandatario hizo un juego de palabras para intentar explicarse ante las reacciones negativas, como las que surgieron desde Brasil, una nación a la cual considera aliada.
"Ahora me están acusando, pero por todos lados, que estoy llamando a la guerra” dijo Chávez. “Lo que he llamado es a mi pueblo y a mis soldados a que nos preparemos más para defender a este país de la amenaza que significa siete bases militares aquí mismo en Colombia", dijo Chávez este martes. Sin embargo en el mismo acto volvió a calificar duramente al Gobierno de Bogotá, al cual llamó de cínico.
Chávez intentó aplacar las críticas al decir que "todas esas acusaciones de guerrerista que ahora me están haciendo, en las últimas 48 horas, que Chávez llama a la guerra, que Chávez está tocando los tambores de la guerra, no", agregó el mandatario.