El volcán Popocatépetl, el tercero más activo en el hemisferio, continúa dando muestras de un incremento en su actividad, lo que llevó al el Comité Científico Asesor del Volcán a aumentar el nivel de alerta de fase dos a fase tres, aún en nivel naranja.
Según habitantes de zonas vecinas al volcán, la actividad del coloso es palpable, y en ocasiones se escuchan rugidos y temblores en el terreno además de la lluvia de cenizas que ya ha llevado a algunos pobladores a evacuar la montaña.
El aumento en el nivel de alerta, anunciado por la Secretaría de Gobierno, implica la ampliación del área de seguridad donde se deben aplicar medidas preventivas ante las altas probabilidades de una erupción de lava. El siguiente nivel de alerta, si se llegase a declarar, sería el rojo, que implica una evacuación inmediata.
La decisión fue tomada tras un consenso entre los expertos de la entidad, pues una eventual erupción podría afectar a tres estados del centro de México que limitan con la gran montaña.
El Popocatépetl ha intensificado su actividad desde 1994 presentando diferentes niveles de alerta. En 1996 cinco escaladores murieron durante una erupción y en 2008 la gran montaña expulsó cenizas volcánicas, lo que obligó a una evacuación.
Según habitantes de zonas vecinas al volcán, la actividad del coloso es palpable, y en ocasiones se escuchan rugidos y temblores en el terreno además de la lluvia de cenizas que ya ha llevado a algunos pobladores a evacuar la montaña.
El aumento en el nivel de alerta, anunciado por la Secretaría de Gobierno, implica la ampliación del área de seguridad donde se deben aplicar medidas preventivas ante las altas probabilidades de una erupción de lava. El siguiente nivel de alerta, si se llegase a declarar, sería el rojo, que implica una evacuación inmediata.
La decisión fue tomada tras un consenso entre los expertos de la entidad, pues una eventual erupción podría afectar a tres estados del centro de México que limitan con la gran montaña.
El Popocatépetl ha intensificado su actividad desde 1994 presentando diferentes niveles de alerta. En 1996 cinco escaladores murieron durante una erupción y en 2008 la gran montaña expulsó cenizas volcánicas, lo que obligó a una evacuación.