El Departamento de Estado, en su informe anual, dice que Irán es el estado más activo en la promoción del terrorismo, y ha estado directamente involucrado en la planificación de actos terroristas en el Medio Oriente.
El informe señala que elementos de la exclusiva Guardia Revolucionaria también apoyan a grupos que usan el terrorismo para alcanzar sus objetivos regionales.
El análisis destaca que entre esos grupos se incluye a organizaciones extremistas palestinas, al grupo chiíta libanés Hazbollah, a los extremistas de Irak, y a los combatientes del Talibán en Afganistán.
El informe del Departamento de Estado señala que Irán continúa siendo una amenaza para los intereses de Estados Unidos y para la estabilidad en el Medio Oriente, debido a su apoyo a tales grupos, al igual que sus gestiones para interferir en el proceso democrático del Líbano.
El estudio también indica que, a pesar de la promesa de Irán de estabilizar Irak, Teherán continúa apoyando a algunos grupos extremistas iraquíes, que llevan a cabo ataques contra fuerzas iraquíes y de la coalición, y contra ciudadanos iraquíes.